El conjunto está conformado por 28 sitios, que responden al modelo urbano de ciudad-jardín, con la disposición de viviendas aisladas y pareadas con un antejardín. Estas construcciones son un ejemplo del modelo habitacional impulsado por el Estado, a principios del siglo XX, para la construcción de viviendas destinadas a la clase media. Las casas fueron concebidas como un conjunto con características arquitectónicas similares entre sí, siendo de dos pisos, construidas en albañilería de ladrillo, con cubiertas de vertientes a varias aguas realizadas en teja de arcilla cocida, adornos de estuco, puertas y ventanas de arco de medio punto o rectas, además de la incorporación de elementos artísticos en sus fachadas.