El rol de los ciudadanos en el combate del COVID-19 está relacionado directamente con el aislamiento social. Es un proceso duro y difícil y que en el caso de los ñuñoínos se ha extendido por un largo período. Pero las recomendaciones de los expertos y de las autoridades están vinculadas a esta acción, porque nos permite evitar la propagación y el contagio. Es por esto que los esfuerzos se han centrado en el llamado a la comunidad a acatar las normativas sanitarias y a permanecer en los hogares.

Desde nuestro municipio, reconocemos el compromiso de gran parte de nuestros vecinos de acatar estas medidas, en particular porque somos una comuna donde la población adulto mayor es importante y hemos querido cuidarlos y eso se manifiesta en el comportamiento personal.

Sin embargo, hay un porcentaje mínimo que no ha acatado estas medidas. Según el informe entregado por la Físcalía Oriente, existe un universo de personas de nuestra comuna que han infringido el artículo 318 del Código Penal, referido a las indicaciones sanitarias en tiempos de pandemia o catástrofe.

Sabemos que en los ñuñoínos prima el cuidado del otro. Pese a esto, queremos recordarles que hoy estamos en una situación de excepción constitucional y enfrentando una de las crisis sanitarias más graves de las últimas décadas. Redoblemos los esfuerzos y mantengamos el respeto de estas restricciones y medidas. Es importante considerar siempre que nuestras decisiones benefician el bienestar de nuestras familias y vecinos. Pronto, todos podremos abrazarnos, pero hoy dependemos de que cada uno de nuestros vecinos respete estas medidas y sigamos combatiendo al COVID-19.