Junto con las vacaciones de invierno, aumentan las enfermedades respiratorias, y para enfrentarlas es fundamental mantener una alimentación saludable de niñas y niños, que es la base para lograr buenas defensas. Sin embargo, la tarea no es fácil, debido a que por lo general, este periodo se asocia con romper las rutinas y dietas alimenticias.
María José Stecher, nutricionista del Departamento de Nutrición y Salud de Fundación Integra, menciona que para tener un tiempo de descanso en familia, donde las niñas/os no resulten afectados en su nutrición, los adultos podemos tomar en cuenta algunos consejos para poner en práctica.
De acuerdo con la profesional, el color de las verduras y frutas representa las distintas vitaminas y minerales que contienen, por ello se deberían incluir al menos tres colores de frutas y verduras al día, así lograrán una mejor inmunidad para enfrentar las enfermedades respiratorias de esta época. “Las verduras pueden ir en ensaladas, guisos, sopas, crema o budines, mientras las frutas son excelentes para una colación de media mañana. Por otra parte, las frutas cítricas como la naranja, mandarina y el kiwi son ricas en vitamina C, y consumirlas frecuentemente permite tanto a adultos y a niñas/os tener resfriados más cortos y menos graves”, explica.
“Niñas y niños deben beber 5 ó 6 vasos de agua al día, para mantener su cuerpo hidratado y saludable. En caso de que estén resfriados o con tos, esto les ayudará a eliminar las secreciones y controlar los síntomas que causan malestar. Ojalá cuenten con una botella que puedan ir llenando con agua varias veces al día”, agrega la profesional.
La nutricionista recalca también que para combatir el frío los niños y niñas necesitan consumir platos que contengan líquidos calientes preparados en base a caldos o guisos y que además tengan un aporte importante de energía como, por ejemplo, las legumbres. “Hay muchas formas de preparar y disfrutar las legumbres. Mezcladas con cereales como arroz o fideos tienen un excelente aporte de proteínas que hacen que el cuerpo tenga mejores defensas para el invierno. La idea es consumirlas dos o tres veces por semana”.
La profesional de Fundación Integra, entrega a continuación diversos consejos para el cuidado de la alimentación de niñas y niños durante este receso invernal.
- Incorpore distintos aliños, como orégano, cilantro, perejil, curry, pimienta a las preparaciones y reduzca la cantidad de sal al cocinar. Esto ayuda a cuidar el corazón de adultos y niñas/os
- El alto contenido de Omega 3 en el pescado, lo convierte en un alimento muy nutritivo, que permite que el corazón y cerebro funcionen bien. Se puede preparar al horno o en caldillo para conservar sus propiedades. Otra alternativa es consumir atún o jurel en conserva, con el que es posible hacer budines, croquetas o incluirlo en ensaladas.
- Recuerde que en el jardín infantil niños y niñas reciben 1/3 de pan. Esa cantidad es suficiente para que sigan creciendo sanos.
- Evite ofrecer a niñas/os alimentos con sellos durante estas vacaciones. Puede preparar en familia colaciones en base a frutas, verduras o lácteos.
- Incorpore a las niñas/os en la planificación y preparación de frutas y verduras durante estas vacaciones, para que aprendan a comerlos y disfrutarlos en familia.
- Organice caminatas familiares de al menos 30 minutos diarios o juegos activos al aire libre o dentro del hogar. De esta manera, niñas y niños consumirán más energía y estarán más sanos.
La importancia de cocinar en familia:
Desde la Dirección de Educación de Ñuñoa, recalcan la importancia de preparar la comida y disfrutarla en familia, pues esta es siempre un placer, más aún si lo hacemos con los más pequeños del hogar. Cocinar puede ser un rito familiar y que sin darnos cuenta refuerza diferentes habilidades, por ejemplo, respetar la norma (una receta); respetar nuestro turno (cada cual tiene un rol en la cocina); además desarrollamos áreas de aprendizaje como el pensamiento lógico y el razonamiento matemático (las recetas tienen un orden para trabajar cada ingrediente y nos señala las cantidades “una cucharada”, 200 ml o una taza, “una pizca”; desarrollamos y fortalecemos el lenguaje expresivo y comprensivo “revolver hasta que quede homogéneo”; “picar la cebolla”; “agregar” agua; “disolver”, entre muchas otras palabras nuevas .
Cuando elegimos el plato que vamos a cocinar y reunimos los ingredientes, se inicia un mundo maravilloso para nuestros niños y niñas, sin que lo sepan están aprendiendo tantas cosas, que luego con el transcurso del tiempo se convertirá en un aprendizaje significativo para sus pequeños.
Receta Tortilla de Espinaca con zanahoria
¿Qué ingredientes necesitas?
Espinaca a gusto
2 zanahorias
1 cebolla pequeña
2 huevos
Sal a gusto
Aceite (una gotita)
Leche a gusto (líquida o en polvo)
¿Cómo se prepara?
Considere que las verduras que utilizará en la tortilla deben estar crudas. Pique la cebolla en cuadros pequeños, remójela por unos momentos en azúcar para que se suavice y fría en aceite bien caliente. Ralle la zanahoria, pique las espinacas y agregue el sofrito., una vez que se haya enfriado. Incorpore suavemente las yemas, la leche y la sal.
Bata las claras a nieve e incorpórelas suavemente para obtener así una tortilla esponjosa. Ponga esta mezcla en un sartén con aceite caliente, desprenda los bordes hasta que siente que la tortilla se levanta fácilmente. De vuelta para cocinarla por el otro lado.
Se puede hacer variaciones con todo tipo de verduras (zapallitos italianos, acelga, etc.).
- Fuente: Recetas para cocinar en familia, Fundación Brotes